lunes, 23 de marzo de 2009

La muerte de un heredero


Mientras los supervivientes de los K.f.m. esperan la respuesta de Boranel, el Alguacil de la Ciudadela del Rey en Sharn, Banarak Tithon, reunió a todos los presentes en la sala del Consejo para proponerles formar un grupo especial de agentes capaz de enfrentarse a la ominosa amenaza de la que las Sagas hablaban en su profecía y que al parecer había llevado a estas últimas a dar tan difícil y osado paso diplomático:

"El Uno que fue dos,
el dos que será Uno:
la decisión de pocos
es destino del mundo.

De otras tierras del hombre han venido,
mas de hombres solo tienen el cuerpo.
Si al gran oso del Sur traen olvido
pronto Droaam también estará muerto.

¡Llamad al dos! ¡Clamad al Uno!
Ya que no puede ser Guerra,
decid, camino profundo
¿Será Paz o sólo tregua?"

A pesar de no gustarle la fuente, y de no ser capaces sus expertos de descifrar su contenido, la referencia profética a amenazas externas al propio Khorvaire ha disparado la curiosidad y la precaución de Boranel: Sora Teraza es ampliamente conocida por sus poderes profeticos a lo largo y ancho del continente; el Viejo Oso ha ordenado la creación de un grupo especial que investigue esta potencial amenaza exterior y tome las medidas pertinentes antes de que llegue a concretarse en algo tan serio que asuste hasta a las hijas de Sora-Kell.
Compartiendo la inquietud de Boranel, pero sin pistas claras de por donde empezar, la intuición del Alguacil Tithon le ha llevado a fijarse en un caso relativamente reciente y que contiene en potencia una bomba de relojería: la muerte a manos de un grupo de aventureros bajo mando de la guardia de Sharn de uno de los herederos de la casa Deneith (ver en el blog "Objetivo: el Daask", "Ayer era un gran día para morir... ¿o tal vez no?" y "El templo de Blibdoolpoolp [o unos Kuo-Toa y algo más]"). El cadaver del heredero Deneith estaba siendo analizado sin mucho éxito en las Cámaras de preservación de la Universisdad de Morgraive, y tanto los pocos resultados y de la investigación como la aparente falta de interés de la casa Deneith por su heredero, hacen pensar a Tithon que este es el punto de unión que buscan: seres extraplanarios, psiónica y casas de la Marca en un mismo saco son malas noticias y pueden ser las amenazas de otras tierras a las que las Sagas hacen referencia; o puede que no, y habrá que buscar en otro sitio...
Pertrechados con las insignias de agentes de la ciudadela y bajo el mando del druida Orok, el nuevo grupo dio su conformidad (aunque por distintos motivos...) y, teniendo que rendir cuentas sólamente a Tithon y a la corona de Breland, y con Nit como enlaceconelresto de Agentes de la Ciudadela, partieron a investigar el cadáver que tanto se había resistido a la investigación mágica. Un augurio preparado por Haiass/Abrojo reveló que sólo la psiónica, en particular la psicodetección, podía extraer información útil para continuar con las pesquisas...

Todos los implicados suben de nivel.

domingo, 22 de marzo de 2009

Sexo, diplomacia y otros cabos sueltos...


Mientras los Linternas oscuras recogían su premio, el corazón de Sora Katra, y se dirigían a Sharn a a través del portal-espejo para informar a T de lo sucedido, los derrotados K.f.m. negociaban con las sagas la venta de su barco volador a cambio de parte del botín que se obtendrá de las cámaras del tesoro aundarianas: se les permitirá tomar un objeto de su elección a cambio del barco, pero además habrán de actuar como embajadores de Droaam en Breland y asegurar una conferencia entre las tres sagas y el rey Boranel en un plazo de tres semanas. Llevando las insignias propias del cargo en una ciudad enemiga y con tan dificil misión por delante, Warlack y Haiass discutían entre sí como llevar a cabo el encargo sin perder barco, objetos y pellejo de una sola tacada...
Mientras tanto Sheark, encerrado en las mazmorras antimágicas de Sora Maenya tras intentar teleportarse dentro del palacio de las sagas, esperaba acontecimientos. La propia Maenya no tardó en aparecer, y declarando las ganas que tenía de vengarse de quien había intentado huir de la batalla y de lo que era su jurado deber, preguntó a Sheark si prefería hablar con ella o con sus hermanas; confuso por los días de encierro, Sheark dijo que con ella, pero al verla enarbolar su martillo de guerra gigante cambió de opinión y le dijo que igual mejor discutía su traición con sus hermanas, tal vez más dispuestas a que el debate fuese menos físico. Maenya le dijo que a cambio de ese favor el debería hacerle otro, cosa que Sheark aceptó; el favor consistía en participar en los "experimentos" de inseminación y mestizaje entre razas a los que la saga es tan aficionada. Tras varios días de drogas, afrodisíacos, esfuerzo físico y nada de sueño, un devastado Sheark fue presentado ante sus compañeros, mientras que Maenya contaba a sus hermanas y al resto de los K.f.m. que el lanzamiento de un conjuro durante la batalla había interferido con las defensas mágicas del palacio, produciéndose un percance mágico que lo había transferido a otra habitación y dejado en tan tristes condiciones como consecuencia: una verdad a medias, las mejores mentiras.
Traspasado ya el portal-espejo, los K.f.m. fueron recibidos por los miembros de las Linternas oscuras y la guardia de la ciudad que custodiaban el cuartel general del desaparecido Daask; afirmando ser embajadores de Droaam, fueron recibidos por T y despues escoltados por el alguacil de la ciudadela del rey en Sharn, Banarak Tithon, a las dependencias del consejo de la ciudad, donde al día siguiente el propio Kord ir´Wynard, hermano menor del rey Boranel de Breland, les recibiría en audiencia para debatir sus propuestas. Apenas amaneció en día siguiente cuando todas las alarmas mágicas y mundanas saltaron al aparecer de la nada el legendario Abrojo a los pies de la cama de Haiass: su nuevo esclavo estaba a sus ordenes.
Después de tan particular despertar, la reunión diplomática entre los representantes de Breland y de Droaam prometía ser bastante tensa. Sin embargo con acertadas palabras, buen tino y las oportunas intervenciones de Takhisis y Grigori, presentes en calidad de asesores, los K.f.m. consiguieron que Kord accediese a presentar su propuesta de encuentro al rey, a condición de que esta fuese una reunión entre facciones y no naciones reconocidas, y las sagas accedieron a que los K.f.m., como muestra de buena voluntad ante el rey, renunciasen a sus insignias diplomáticas. Pero será el rey Boranel quien decida si se reune o no con quien casi todos los Brelios consideran las responsables del asesinato de su primera mujer y único amor, la dama Chaseeva ir´Masaat de Cyre

Continuara...